La puesta en escena Báthory contra la 613, escrita por el dramaturgo español Juan Manuel Romero Gárriz, plantea en el escenario teatral el encuentro imaginario, en medio de un juicio, entre Erzsébet (Elizabeth) Báthory, la famosa condesa húngara que torturó y asesinó a más de 600 mujeres en el siglo XVI, y su criada número 613, la única que, supuestamente, logró escapar de la muerte.
Dirigida por Daniela Parra y con la actuación de la actriz Ana Isabel Esqueira, la propuesta cumplirá una temporada en el Teatro Benito Juárez de la Dirección del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, del 31 de marzo al 10 de abril, con funciones de jueves a domingo.
Romero Gárriz escribió Báthory contra la 613 para dar su visión muy contemporánea de un juicio imaginario a Erzsébet (Elizabeth) Báthory, conocida como “la Condesa Sangrienta”, quien vivió en el imperio austrohúngaro y cobró fama por ser la mujer que más congéneres ha asesinado en la historia.
A cada una de sus víctimas –612 doncellas–, se cuenta, las torturó hasta la muerte. Eran mujeres que estaban a su servicio, recibían impensables castigos, ya que –hace referencia la leyenda– consideraba que bañarse en la sangre de sus víctimas la mantenía bella.
¿Vampira?, ¿asesina?, ¿víctima de una conspiración política? “La Condesa Sangrienta” es un personaje vanagloriado por la cultura contemporánea del siglo XXI, mientras que sus víctimas continúan como “solo una cantidad de mujeres asesinadas, sin identidad”. En esta versión mexicana, la puesta en escena, con un poco de drama y un toque de humor, retrata “una realidad en donde los más cruentos asesinos son idolatrados”.
La puesta da cuenta del encuentro imaginario entre Erzsébet Báthory y su criada número 613, la única que, supuestamente, logró escapar de la muerte, y entonces, en el juicio, habla “por aquellas que no pudieron defenderse”.
Se trata, pues, de un texto que, en forma de juicio, viaja en el tiempo y expone las razones de la de la misma Báthory, así como el testimonio de las doncellas que fueron castigadas y –paradójicamente– cómplices en los presuntos caprichos de la Condesa.
La directora Daniela Parra –egresada de CasAzul y directora residente de la Compañía Nacional de Teatro– se propone aterrizar la historia mediante una puesta en escena que desde su concepción plástica mezcla elementos contemporáneos y del siglo XVI para generar “una nueva estampa” y enfrentar a la asesina con su víctima 613.
Fundamentalmente, lo que se propone este montaje –dice Daniela Parra– es promover la sensibilidad del público con respecto a la invisibilidad de las víctimas, ya que –agrega– esas 613 doncellas no son húngaras sino mujeres universales y, por lo tanto, mexicanas. Por ello el cuestionamiento: “¿Cuántos cadáveres más hay, en cuántos sótanos?”
“¿Si me pierdo quién me recordará?, ¿quién me buscará?, son preguntas con las que las mujeres mexicanas vivimos todos los días. Nosotras, que hemos crecido con la palabra feminicidio, entendida como parte de nuestro lenguaje, nos encontramos con este texto en el que la doncella 613 dice: ¿quién conoce mi nombre?, ¿quién el nombre de las 600? Nada encuentro en Internet si me busco, nada…”, comenta la directora de escena.
Y agrega: “Podemos afirmar que comprendemos la responsabilidad cultural y económica de ser beneficiados por un estímulo fiscal. Gracias a su obtención en 2019 es que tenemos los valores económicos y artísticos que le dan solidez a nuestro discurso. Es nuestra obligación explotarlos al máximo. ¿Cómo volverá el espectador?, ¿qué habrá perdido?, ¿qué habrá vivido?
En la obra actúan la actriz Ana Isabel Esqueira como Elizabeth Báthory, acompañada de Andrea Parra y Daniela Carpintero como la Doncella 613. La escenografía e iluminación es de Erika Gómez, vestuario de Rodrigo Sosa y audio de Brandon Salazar, en una producción de Rodrigo Caravantes y Daniela Parra.
Báthory contra la 613 se presentará del 31 de marzo al 10 de abril, los jueves y viernes a las 20:00 horas, sábados a las 19:00 y domingos a las 18:00 horas, en el Teatro Benito Juárez (Villalongín 15, colonia Cuauhtémoc, Metrobús Reforma), con las disposiciones del semáforo epidemiológico vigente: uso permanente de cubre-bocas, gel anti-bacterial y registro de código QR por parte tanto del personal del teatro como de los espectadores.
Entrada general, $168. Los boletos se pueden adquirir en la taquilla del teatro y en las plataformas digitales de Ticketmaster.