El pasado sábado 30 la compañía de nacional de danza a cargo de Elisa Carrillo y Cuauhtémoc Nájera, directores artísticos, cerro el mes de noviembre con dos espectaculares piezas coreográficas aclamadas internacionalmente en el teatro de la ciudad Esperanza Iris.
La compañía mejor conocida como INBA se remontan a 1963, cuando se creó el Ballet Clásico de México por iniciativa de Celestino Gorostiza, entonces titular del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
Con una aleación de géneros clásico, neoclásico y contemporáneo se ha dado paso al nacimiento de una agrupación estable de ballet en el país que, desde entonces, se enfoca en rescatar el repertorio de la época de oro de la danza de México y el mundo e impulsa el trabajo de ballets clásicos y contemporáneos.
Por primera ocasión estás grandes piezas fueron presentadas en el teatro de la ciudad a cargo del revolucionario de la danza moderna, Nacho Duato, el cual mostró “Por vos muero” y uno de los coreógrafos más importantes del siglo XX, Uwe Scholz, con el “Tercer concierto para piano de Rachmaninov”.
Por voz muero, fue la primera interpretación mostrada en escena, la cual contaba con técnica y gracia en escenario mostrando así la música española de los siglos de oro, con versos de Garcilaso de la Vega y a la vez un homenaje al papel que ocupaba en esa sociedad.
Por otro lado, para terminar con broche de oro, el Tercer concierto para piano es un ballet sinfónico en tres movimientos, inspirado en el estilo del pintor y precursor del arte abstracto Vasili Kandinski, representado por más de 15 bailarines en escena, uno que otro dueto y solos que deslumbraron a los presentes con su técnica y el manejo de luces en escena.
Por Fernando Cleto.