Encuentros y desencuentos, turbulentos pasajes de la vida de uno de los grandes genios de las artes plásticas modernas son explorados por un texto dramático escrito por Mario Iván Martínez, que se adentra en la vida y la obra de Vicent van Gogh (1853-1890).
Van Gogh es la representación de quien, bajo el estereotipo de “loco”, es despreciado a causa de la incapacidad colectiva para mirar más allá de las estructuras dominantes de la razón. Vincent hizo evidente que el delirio poético está lleno de verdad, plagado de belleza y sumergido en una potencia capaz de develar lo invisible a la mirada pragmática.
Mario Iván Martínez se subirá al escenario del Teatro de la Ciudad Esperanza Iris de la Dirección del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, donde interpretará Van Gogh, un girasol contra el mundo, su propio texto bajo la dirección de Luly Rede, a partir de la inspiración que le dio prestar su voz al documental Vincent, pinceladas de un genio, de Peter Knapp y Francois Bertrand –producido por el museo de Orsay, el museo Van Gogh y el Centro Cultural Tijuana–.
El actor mexicano decidió someterse a un exigente proceso de creación literaria para darle seguimiento a la experiencia. Después de tres años de trabajo, este afán ha desembocado en un nuevo texto dramático que es llevado a escena.
“Es innegable que el siglo XXI vive un romance con Van Gogh; todo acerca de él hechiza y conmueve hasta la médula. En el mundo contemporáneo abundan las propuestas fílmicas y los tratados sobre su misteriosa existencia. El museo Van Gogh en Amsterdam recibe a más de dos millones de visitantes anuales. Al mismo tiempo, Arlés, el poblado al sur de Francia que lo expulsó de sus tierras –donde creó algunas de sus obras más memorables–, gira alrededor de su persona: restaurantes y hoteles gritan su nombre como si quisieran expiar la culpa de haber aborrecido a quien hoy se presenta como su hijo predilecto”, afirma Mario Iván Martínez.
El autor de la obra también asegura que “este hombre cultísimo, sensible y solitario, hijo de un pastor protestante, llegó a pasar días enteros sobreviviendo con un pedazo de pan fiado y múltiples tazas de café, pintando restaurantes donde no podía sentarse a comer por falta de recursos.
“Van Gogh no vivió lo suficiente para ver cómo se reconocía su talento, pero tampoco habría podido soñar con que se convertiría en una fuente de inspiración para posteriores generaciones de artistas. Vincent quiso exorcizar el dolor a través de su arte; la pintura fue el impulso vital que le garantizó la redención y su historia es digna de ser contada”.
En Van Gogh, un girasol contra el mundo, también, se resalta la figura de la escritora feminista Johanna Bonger de Van Gogh, cuñada de Vincent y heredera de su vasta producción pictórica y epistolar.
Cabe resaltar que la puesta se presentó por primera vez en 2019, interpretada por Paula Comadurán y Fernando Memije. En esta ocasión, Mario Iván Martínez asume la obra en una prodigiosa versión unipersonal.
Mario Iván Martínez es un reconodico actor, productor y cantante de música antigua. Realizó estudios de Actuación y Canto en Inglaterra, bajo el auspicio del Consejo Británico en la Academia de Música y Arte Dramático de Londres (LAMDA), especializándose en la obra de William Shakespeare. Fue merecedor del Ariel, La Estrella de plata y el premio ACE de Nueva York por su actuación en la cinta Como agua para chocolate, de Alfonso Arau. Fue beneficiario del programa Creadores Escénicos con Trayectoria del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes 2019-2021.
Van Gogh, un girasol contra el mundo se presentará el sábado 7 de octubre a las 19:00 horas en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris (Donceles 36, Centro Histórico, cerca del Metro Allende).
Localidades: Luneta y Primer Piso Central $400, Primer Piso Lateral $350, Anfiteatro $250 y Galería $200. Los boletos se pueden adquirir en la taquilla del teatro y en las plataformas digitales de Ticketmaster.